@MonicaG_AND gracias, lo trasladamos a la sección para que valore su publicación
— LaVanguardia.com (@LaVanguardia) junio 14, 2012
El día en el que se publicó la información en la web la pareja recibió un aluvión de solicitudes de papeletas para optar al dúplex que sortean para evitar el embargo, un gran número de peticiones procedentes incluso de lugares como Abu Dhabi o Caracas. Además de haber sido publicada en La Vanguardia.com y La Vanguardia impresa la noticia sobre el sorteo de su piso será emitida en breve por Telecinco y TVE, y canales como TV3 y 8 TV también se han mostrado interesados en su caso. Mónica explica también que personajes tan populares como Santiago Segura, con más de un millón de seguidores, se hicieron eco del sorteo del piso.
En Twitter existen actualmente unos 140 millones de usuarios, una cifra baja si se compara con los los 900 millones de perfiles activos con los que cuenta Facebook. A ello se suma que la gran mayoría de los usuarios de la red social de microblogging no son tan activos como en el entorno de la red creada por Marck Zuckerberg, la más usada del mundo. Pese a esta gran diferencia en número de cuentas y en su grado de actividad, Mónica está convencida de que con Facebook no se logra tanta repercusión y eso tiene su explicación en las características propias de cada plataforma: En Twitter las publicaciones no tienen restringida su privacidad -en la gran mayoría de los casos- y en ese mismo entorno los anónimos se encuentran con los más influyentes, con los que resulta relativamente fácil contactar. Si se consigue que alguno de ellos se haga eco del mensaje, la viralidad de éste se multiplica de forma exponencial, precisamente lo que le ocurrió a la pareja de Andorra. Son muy pocos los medios de comunicación y personajes públicos los que no están presentes en esta red social.
Mónica afirma estar sorprendida con las dimensiones que ha adquirido la noticia sobre el sorteo de su dúplex y anima a todo el que pueda a hacer lo mismo. A día de hoy ya ha vendido más de la mitad de las papeletas y previsiblemente acabe vendiendo muchas más, porque a falta de que la noticia se redifunda por otros medios, aun es imposible calcular el poder real de aquel tuit.
